Vientre plano en dos semanas: ¿es posible?
Para lograr un cuerpo sano y en forma, lo más importante es cambiar algunos hábitos de estilo de vida y seguir constantemente una serie de reglas dietéticas y deportivas. En las siguientes líneas te ofrecemos algunos consejos sobre cómo conseguir un vientre plano.
Gracias a la determinación y la fuerza de voluntad, es posible adelgazar y reducir la cantidad de grasa acumulada en el abdomen. Para triunfar, como decíamos, ante todo es necesario adoptar una dieta sana y equilibrada, adaptada a las necesidades individuales.
Además, es fundamental la práctica de ejercicio físico de forma regular. En este sentido, los ejercicios cardiovasculares (si es posible, de alta intensidad) son especialmente recomendados para quemar grasas, según un estudio publicado en la Revista Internacional de Nutrición Deportiva y Metabolismo del Ejercicio.
Consejos de dieta para un vientre plano
Para conseguir un vientre plano, así como para mantenerse, en general, en buenas condiciones físicas, es fundamental cuidar la nutrición. Aquí es donde surge el concepto de «dieta equilibrada», que se refiere a saber qué comer y en qué cantidades. Este tipo de dieta se describe en detalle en una publicación de la Organización Mundial de la Salud.
Hoy vivimos en una sociedad caracterizada por la gran disponibilidad de alimentos. Sin embargo, todos los días nos encontramos con el problema de saber elegir una dieta que sea realmente adecuada. No todos los alimentos que se nos ofrecen tal como son en realidad lo son.
Como indica un reciente estudio realizado por Ángeles Carbajal Azcona, del departamento de Nutrición de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid, el interés por todo lo relacionado con la nutrición está en constante crecimiento: por ello, es necesario establecer y difundir claramente las normas generales que Hay que tenerlo en cuenta para planificar una dieta equilibrada.
También te puede interesar leer: Dieta equilibrada para adelgazar de forma saludable
La importancia de una dieta variada
Según el autor citado, para que una dieta sea equilibrada desde el punto de vista nutricional, es fundamental que incluya todos los nutrientes necesarios, para evitar déficits. Esto se puede lograr fácilmente si la dieta incluye alimentos pertenecientes a diferentes grupos de alimentos, como cereales, frutas, verduras, aceites, productos lácteos, carnes y pescados.
Los nutrientes se encuentran ampliamente distribuidos en diversos alimentos: de esta forma, es posible obtenerlos a partir de un gran número de combinaciones diferentes. Según el especialista, seguir esta regla es garantía suficiente del equilibrio nutricional.
Además, debe existir un correcto equilibrio entre los distintos alimentos. El consumo excesivo de un determinado alimento, de hecho, puede sustituir a otro que contenga un determinado nutriente. La moderación en las cantidades consumidas para mantener un peso adecuado y, sobre todo, evitar aumentar los niveles de grasa corporal es una regla de oro.
Ejercicios para tener un vientre plano
El ejercicio es el otro pilar fundamental gracias al cual es posible obtener un vientre plano. Como dijimos, para lograr resultados es necesario ser constante y seguir siempre a tu propio ritmo.
Pablo J. Marcos, doctor en ciencias del deporte e investigador principal del Grupo de Investigación en Salud, Actividad Física, Fitness y Conducta Motora de la Universidad Católica de Murcia, indica en una publicación que ejecutando entre 30 y 60 minutos diarios de ejercicio se puede mejorar su salud.
Respecto a este tema, podemos distinguir entre las siguientes alternativas.
1. Ejercicios de alta y baja intensidad
Como explicamos anteriormente, la evidencia científica confirma la utilidad de practicar ejercicios cardiovasculares de alta intensidad para quemar la mayor cantidad de grasa posible.
Si elige este método, una opción es alternar varios minutos de ejercicio cardiovascular de intensidad moderada con varios minutos de cardio de alta intensidad. Generalmente, estas sesiones duran unos 30 minutos.
No obstante, es importante señalar que no todas las personas son aptas para seguir este tipo de rutinas. Por eso, antes de empezar a practicarlos, te recomendamos que consultes a tu médico o especialista en actividad física.
2. Ejercicios de fuerza
El entrenamiento de la fuerza muscular es un método para causar hipertrofia o, en otras palabras, el crecimiento del volumen muscular, como explica un estudio publicado en Journal of Strength and Conditioning Research.
Dado que los músculos consumen más energía en reposo que la grasa, aumentar la masa corporal magra le permite estimular el metabolismo y así reducir el tejido adiposo (o, en otras palabras, quemar grasa) incluso después de hacer ejercicio.
También te recomendamos que leas: Aumentar la masa muscular y quemar grasa
3. Ejercicios localizados
Finalmente, es posible que desee considerar agregar ejercicios abdominales para desarrollar los músculos oblicuos y los abdominales inferiores y superiores. Luego puede practicar ejercicios como sentadillas, abdominales, giros, planchas y abdominales inversos.
Sobre este punto, es necesario realizar una aclaración, a fin de evitar posibles malentendidos. Como indica un estudio publicado en el Journal of Strength and Conditioning Research, no es posible quemar grasa localmente a través del ejercicio.
En otras palabras, esto significa que hacer miles de abdominales al día no será suficiente para tener un estómago plano ; este hecho es confirmado por un experimento descrito en 2011 por esta misma revista científica.
Sin embargo, la ejecución de estos ejercicios sigue siendo muy recomendable. Según un artículo de la Clínica Mayo, los ejercicios que involucran la parte central del cuerpo ayudan a mejorar la estabilidad y el equilibrio; al mismo tiempo, pueden ayudar a mejorar el rendimiento deportivo.
Si quieres un vientre plano, concéntrate en este objetivo
No siempre es fácil adoptar estos hábitos. Por este motivo, sobre todo al principio, es recomendable que recurras a un especialista que te ayudará tanto en la dieta como en el ejercicio. Un buen entrenador personal puede enseñarle qué actividades debe realizar en función de sus objetivos y habilidades.
Finalmente, el aspecto fundamental es seguir los ejercicios y la dieta de forma constante. A menudo, el secreto para lograr sus objetivos radica en la paciencia y el trabajo bien hecho. ¡No se desanime si, después de dos semanas, todavía no ha alcanzado su objetivo!