10 señales de que eres un adicto a correr

Louise Damen

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1

El equipo de carreras es obsesivo

Tienes más equipo para correr que ropa elegante y consideras socialmente aceptable andar por el supermercado en Lycra o calcetines de compresión.

2

Frenesí de estiramiento

A menudo te encuentras con una rutina de estiramiento espontánea en público – ya sea haciendo cola en la tienda o llenando de gasolina, ¡siempre es bueno estirar los tendones de la corva!

3

En todas partes hay una oportunidad de correr

Cada vez que ves un campo de golf, un sendero o un parque, piensas: «Qué lugar tan bonito para correr» o «Me encantaría romper algunos intervalos por ahí».

4

Madrugador

Estás preparado para poner tu alarma para las «tontas en punto» simplemente para que puedas encajar en una carrera antes de tus otros compromisos del día.

5

Nombra tus rutas/segmentos

Tienes apodos para las diferentes rutas de carrera y/o las colinas o secciones desagradables en ellas.

6

¡Redondeando!

Regularmente corres en pequeños círculos simplemente para redondear la distancia o el tiempo. Si tu agenda dice que tienes que correr 7 millas, 6.9 millas es inconcebible!

7

¡Me encanta el olor del calor profundo de la mañana!

Usas Deep Heat como perfume.

8

¡Medalla, medalla, medalla!

Acumulas medallas de carreras como una urraca y tienes cajas de ellas en tu habitación de invitados, la cocina, bajo tu cama…

9

El acosador de los medios sociales

Sigues ávidamente a otros corredores en cualquier plataforma de medios sociales que puedas.

10

Se pone verde de envidia cuando no puedes correr

Tienes sentimientos de celos antinaturales cuando ves a otras personas corriendo cuando tú no puedes.