Las bacterias en la comida puede que no suenen como algo bueno, pero cuando se trata de probióticos lo son. Los probióticos son organismos vivos, en su mayoría bacterias o levaduras, que son útiles para la salud. Viven en el intestino y están vinculados a una serie de beneficios para la salud, desde la prevención de enfermedades hasta el tratamiento de trastornos gastrointestinales y del estado de ánimo.1 Echa un vistazo a los probióticos: qué son, qué hacen y quién debería tomarlos.
¿Qué son los probióticos?
Los probióticos son «microorganismos buenos» que son similares a las bacterias beneficiosas de tu intestino. Tomarlos como suplemento o en la comida puede ayudar a promover un buen equilibrio de las bacterias beneficiosas en tu sistema.
Algunos de los probióticos más comunes se encuentran en la familia Lactobacillus o en la familia Bifidobacterium:2
- L. acidophilus
- L. casei
- L. rhamnosus
- L. bulgaricus
- L. plantarum
- L. helveticus
- B. bifidum
- B. longum
- B. breve
- B. infantis
Cuando se realizan estudios sobre los probióticos, éstos especifican las cepas y las dosis, por lo que buscar en la literatura y hablar con su médico puede ayudarle a encontrar el tipo de probiótico adecuado para usted.
Beneficios
Hay muchas razones por las que alguien puede querer tomar probióticos, ya que se usan tanto para tratar problemas como para prevenir otros. Algunos usos de los probióticos se están estableciendo bastante, como en la restauración de las bacterias beneficiosas a su microbioma después de una dosis de antibióticos; o tomarlos para tratar la diarrea.3
Otras áreas de investigación están todavía en curso, pero se muestran prometedoras en la prevención o el tratamiento de una variedad de afecciones, entre ellas:
- Intolerancia a la lactosa4
- Helicobacter pylori (la bacteria que causa las úlceras)
- Presión arterial alta5
- Infecciones por levaduras
- Colesterol alto6
- Estreñimiento
- Síndrome de intestino irritable y colitis7
- Diabetes tipo 28
- Cáncer de colon9
- Infecciones debidas a un sistema inmunológico debilitado
Los probióticos también pueden contribuir a un envejecimiento saludable al mejorar la función inmune.
¿Cómo se toman los probióticos?
Los probióticos pueden tomarse de varias maneras, incluyendo:10
- En el yogur o la comida: Comer yogur es la principal forma en que la gente se expone a los probióticos. También se pueden encontrar en el kefir (una bebida tipo yogur), en el suero de leche y en alimentos fermentados, como el kimchi o el chucrut. En comparación con otras formas de probióticos, estos alimentos proporcionan una concentración relativamente baja de organismos.
- Como un polvo: También hay polvos que están compuestos de probióticos (mezclados con un relleno) que pueden ser mezclados en líquidos o alimentos y consumidos. Muchos de estos necesitan ser refrigerados.
- En forma de cápsula: Es común encontrar algunos probióticos (especialmente Lactobacillus acidophilus o Bifidobacterium bifidus) en forma de cápsula. Muchas de ellas necesitan ser refrigeradas.
- En forma de «Perla»: Parecen píldoras muy pequeñas y redondas, las «perlas» probióticas están recubiertas para que pasen a través de tu estómago y se disuelvan una vez que están en tu tracto intestinal. Se supone que esto es importante, ya que el ácido del estómago puede matar a la mayoría de los microorganismos útiles antes de que lleguen a los intestinos, donde realmente pueden trabajar.
¿Quién no debe tomar probióticos?
Si está tomando algún tipo de medicación inmunosupresora o está inmunosuprimido (si tiene el VIH, por ejemplo), querrá preguntar a su médico sobre los probióticos antes de tomarlos en cualquier forma. No parece haber ninguna interacción documentada entre los medicamentos y los probióticos.11
El resultado final
Los probióticos tienen muchos beneficios potenciales y muy pocos inconvenientes, aunque todavía hay que hacer más investigaciones. Tal vez quieras considerar la posibilidad de añadirlos a tu régimen, especialmente durante los momentos en que te recetan antibióticos o cuando tienes algún tipo de problemas digestivos. Pero, como siempre, consulta a tu médico para que te aconseje.
