Los 10 mejores consejos para despejar su mente
Los 10 mejores consejos para despejar su mente
Declutar tu mente se trata de despejar tu cabeza para que puedas concentrarte en las cosas importantes. Aquí hay 10 maneras de despejar tu mente y concentrarte.
5 minutos de lectura
Declutar tu mente se trata de despejar tu cabeza para que puedas concentrarte en las cosas importantes. Aquí hay 10 maneras de despejar tu mente y concentrarte.
1
Haga una lista de tareas
Haga una lista de tareas
Si tienes un número particularmente grande de cosas que recordar, entonces escríbelas en una lista en lugar de tenerlas todas almacenadas en tu cabeza. Esto te ayudará a despejar tu mente permitiéndote «vaciar» todas tus ideas en la página, lo que significa que no tendrás que recordar todos los elementos. Hacer una lista en el ordenador es una buena idea, ya que es menos probable que pierdas la lista y podrás añadir o eliminar elementos fácilmente. Además, puedes configurar el equipo para que te dé un mensaje recordatorio cuando necesites completar un elemento concreto de la lista.
2
Escribir un diario o mantener un blog
Escribir un diario o mantener un blog
Si tienes muchas ansiedades y preocupaciones, entonces escribirlas en un diario o empezar un blog puede ayudarte a ponerlas en algún tipo de perspectiva. Escribir todos tus pensamientos despeja el espacio en tu cabeza, de modo que serás libre de usar tu mente para reflexiones más satisfactorias y significativas. Simplemente reserve una cierta cantidad de tiempo cada día para su sesión de escritura con el fin de despejar regularmente su mente. Su diario o blog también actuará como una buena fuente para cuando necesite mirar hacia atrás y averiguar cuándo hizo cosas específicas.
3
Organízate
Organízate
Su mente estará a menudo llena de pensamientos como «¿Dónde he puesto mi cartera?» o «¿Tengo que ir a una tienda de comida hoy?», que pueden minar su energía mental si se acumulan demasiado. Para evitar esto, siempre debes ser lo más organizado posible. No hay nada más molesto que perder un artículo, tus llaves son probablemente las peores culpables, así que siempre pon los artículos importantes en el mismo lugar. Además, si planeas con antelación no tendrás que pensar en si necesitas o no hacer una cierta actividad, como ir al supermercado el mismo día.
4
Dejar ir la negatividad
Dejar ir la negatividad
Eres tú y sólo tú quien está a cargo de lo que pasa por tu mente – pero de alguna manera muchos de nosotros nos permitimos empantanarnos con pensamientos negativos. Si vas por ahí pensando negativamente todo el tiempo, entonces nunca estarás de buen humor, así que es mejor dejar ir los pensamientos negativos siempre que sea posible, ya que eso aliviará tu mente del estrés excesivo. Después de todo, si algo te ha hecho enfadar, ¿de qué sirve guisarlo todo el día?
5
Aprende a decir «no
Aprende a decir «no
Algunas personas no pueden decir que no, y siempre dicen «sí» cuando se les ha pedido que hagan favores a otros o se les ha ofrecido una invitación. Si ya tienes suficiente en tu plato, entonces no te sientas tentado de añadir a ello y a tus niveles de estrés potencial. Así que, si un compañero de trabajo te pide que hagas algo, piensa siempre en si es práctico o no que te hagas cargo de la tarea. Y seguramente habrá una o dos cosas a las que puedas decir «no» en otras áreas también. A veces, si sigues diciendo que sí a algo, se convierte en un hábito, y muy a menudo te quedas atascado en hacerlo, así que entrénate para decir «no» cuando lo necesites.
6
Evita las interrupciones
Evita las interrupciones
Si tu cabeza está nadando con cosas por hacer y te interrumpen frecuentemente, probablemente no llegues a ninguna parte y sientas que tu mente está sobrecargada. Las interrupciones pueden hacer que tu productividad caiga en picado, así que intenta evitarlas siempre que sea posible. Por ejemplo, si tienes algo particularmente importante que hacer en el trabajo, considera la posibilidad de trabajar desde casa si se te permite hacerlo, ya que así podrás evitar la mayoría de las interrupciones que suelen producirse en el lugar de trabajo.
7
Sólo hazlo… ¡no pospongas las cosas!
Sólo hazlo… ¡no pospongas las cosas!
Una de las peores cosas para desordenar tu mente es posponer las tareas que tienes que hacer. Se quedan ahí en tu cabeza y se te escapan para que no puedas concentrarte en otra tarea que estés haciendo en ese momento. Por lo tanto, nuestro consejo es hacer lo que sea que necesites hacer tan pronto como sea posible, para que puedas sacártelo de la mente y concentrarte en la siguiente tarea. Si no lo haces, ¡a menudo pondrás más energía en pensar en hacer algo que en hacerlo realmente! Y recuerda: es asombroso lo rápido que puedes hacer algo una vez que finalmente te comprometes a hacerlo.
8
Busca ayuda
Busca ayuda
A veces te pierdes lo obvio. La solución de un problema puede estar a veces frente a ti, pero por alguna razón puedes ser incapaz de verla, y cuanto más luches con un problema, más se atascará tu mente y se llenará de pensamientos potencialmente improductivos. Si sientes que esto empieza a suceder, pide ayuda a un amigo. Su perspectiva del problema puede ser diferente y más útil, y así podrás encontrar una solución y aligerar tu carga más rápido de lo que lo harías por tu cuenta.
9
Tómese un descanso.
Tómese un descanso.
10
Sé honesto.
Sé honesto.
Contar mentiras, incluso con las mejores intenciones, sólo puede aumentar la carga de trabajo de tu mente. Una mentira a menudo lleva a otra, y así terminas teniendo que recordar las mentiras que ya has dicho para que no te pillen. Nuestro consejo es que seas honesto sobre tus sentimientos con las personas y las situaciones. Por ejemplo, si te sientes molesto o frustrado por cualquier motivo, compartirlo -en lugar de mentir y decir que estás bien- puede ayudarte a descargar parte de la tensión de tu mente.